Hoy fue detenido un hombre de 29 años que quemó con agua hirviendo en la cara a su ex pareja de 32 años luego de una discusión. Al llamar al 911 la policía llego rápidamente al domicilio de calle 538 al 1100 en Quequén. Una ambulancia del SAME le realizó las primeras curaciones,pero luego trasladada al Hospital Emilio Ferreyra. Se radicó la denuncia en la Comisaría de la Mujer y Familia.
Más tarde personal de la Comisaría Segunda arresto en 538 y 541 al agresor, el cual presentaba lesiones en su rostro. Se pudo saber que el hombre tenía denuncias por violencia de género de hace 7 años atrás, las cuales fueron archivadas.
Esta situación se suma a la del martes cuando fue detenido un joven de 26 años al cual se le secuestró una escopeta con la que amenazaba a su mujer. La investigación se inició en noviembre una vez hecha la denuncia. El fiscal Eduardo Núñez labro la causa por amenazas agravadas.
Pero no todo queda ahí, el lunes un hombre de 68 años se le abrió una causa por amenazas agravadas y lesiones leves por atacar con un cuchillo a su pareja de 43 años en 521 al 1300. Este fue notificado de la causa pero no quedo detenido, declaró ante el fiscal Eduardo Núñez.
No hace más de un mes Guillermo Farías asesinó a Natalia Bandiera. Ayer se condenó al Jorge Ricardo Ortega a pena de reclusión perpetua por dar muerte a su ex pareja el 22 de enero de 2018.
Es preocupante la cantidad de casos que han tomado estado público en estos días. En Necochea tenemos un terrible historial de femicidios que en el último mes se ha visto agudizado o al menos visibilizado. Entre el terrible historial contamos con femicidas como Martín Llinás (hoy libre, ya que cumplió condena) que asesinó sin piedad a su mujer Claudia Iraola. Omar Larrea quien luego de disparar con una escopeta a su ex pareja, con la que convivía, uno vivía adelante y el otro atrás, se suicidara. Y muchos más…
¿Hasta cuándo vamos a seguirlo permitiendo?
