El ministro de Salud de la Provincia, Daniel Gollán visitó fugazmente Necochea. Junto a autoridades municipales recorrieron el Ferreyra y el modular destinado a Covid-19 que viene invirtiendo la nación y la provincia. Junto al equipo de Salud de la comuna analizaron la situación epidemiológica en el distrito, instando a reforzar el cumplimiento de normas y protocolos en nuestro medio.

Ofrecieron una conferencia de prensa a la salida del hospital modular, ocasión en la que el funcionario bonaerense adelantó que “próximamente enviaremos dos camas más de terapia intensiva para Necochea con toda la aparatología necesaria, como respiradores, monitores, bombas de infusión, con el fin de seguir ampliando la capacidad” al tiempo que aseguró que en época de pandemia “ha habido mucha inversión de la Nación y de Provincia”.

Sobre la actualidad pandémica, Gollán subrayó que “hay dos variantes que están circulando fuertemente y con mucha agresividad” y en ese aspecto reconoció que “si tuviéramos el mismo virus que el año pasado, esto estaría mucho más controlado, a lo mejor todos estaríamos en fase 5, pero este es siete veces más contagioso y ataca con más crueldad, incluso a los más jóvenes que se ponen, en algunos casos, terriblemente mal en pocas horas”.

Luego, el ministro afirmó que “mientras vamos vacunando, subimos y bajamos la circulación en los municipios según los contagios, que es lo que determinamos cada martes” para adelantar que “en los próximos días entrarán a la Provincia de Buenos Aires más de 2 millones de vacunas, y muchas de ellas serán utilizadas para segundas dosis” para resaltar que con esta novedad “nuestro más inmediato objetivo será aplicar 120.000 dosis diarias en la provincia”.

Además, en el anterior sentido, señaló que “ya aplicamos una cantidad de dosis que ha permitido que todos los mayores de 60 con comorbilidades y mayores de 70 años estén vacunados, como así también la mitad de los docentes y 32.000 policías, que es un tercio de la fuerza”.

Y cerró: “Las vacunas funcionan todas bien y son la esperanza, y si en dos o tres meses logramos empezar con los mayores de 18 años con comorbilidades, con los de 40 años también, empezaremos a entrar una normalidad”.