Un móvil del Comando de Patrullas se dirigió a una casa en 586 al 2500, donde un llamado al 911 denunciaba un confuso episodio; un hombre de 31 años sufrió cortes y puntadas en uno de sus brazos.

Según testigos presenciales, incriminaron a la adolescente por la agresión y paralelamente otra llamada al 911 dio cuenta de la llegada del herido al hospital local. El sujeto registraba antecedentes policiales y no quiso efectuar acciones legales sobre la joven.

La policía informó que aunque se dio aviso a la UFI N.º 5 (especializada en minoridad) no se depusieron medidas sobre la joven. Se realizaron actuaciones de oficio e intervinieron la UFI N.º 5 (minoridad) y la UFI N.º 10 (Género).