La hija de Jorge Rial le inició acciones legales a Facundo Ambrosioni, el padre de su hijo. La Justicia le dio un botón antipánico y le impuso a él una restricción perimetral.
Tras confirmar que se había separado de Facundo Ambrosioni a tres meses de haber sido madre de Francesco, More Rial comenzó de a poco a entregar detalles de la ruptura. El jueves, en Los Ángeles de la Mañana, reveló infidelidades, pero este viernes fue más allá, y contó que denunció a su ex por violencia y que tiene un botón antipánico.
“Se me rompió mi familia, me quedé sola con un bebé de tres meses”, contó entre lágrimas la joven en Involucrados, el programa que conduce Mariano Iúdica en la pantalla de América. “Hubo violencia desde que nació Fran. Cuando tenga todos los papeles voy a poder hablar bien. La denuncia está hecha, la hice ayer. Lo pude hablar con una de mis mejores amigas el mismo día que pasó”, confesó en vivo.
“Estoy tranquila, estoy cuidada y sé que él no se me puede acercar”, contó la hija de Jorge Rial. “La primera vez que le pedí a Facundo que se vaya de mi casa yo ya lo había llamado a mi papá, porque me cuesta mucho despegarme de la relación. Me dijo que lo hablemos porque teníamos un hijo en común, y que él no quería generar otra vez una guerra. Ese día discutimos, pasaron las cosas que pasaron. Hace una semana le encontré todos los mensajes con otras minas y ahí dije basta. Papá sabe todo. No se lo dije en la cara pero se lo dije por teléfono”, agregó.
A su vez hizo referencia a la pelea que mantuvo con su padre tiempo atrás como a su internación y aseguró que todo fue culpa de Ambrosioni. “Mi papá siempre tuvo razón“, comentó. Y agregó convencida: “Mi hermana me dijo: ‘Qué bueno que lo dejaste’. Hoy a la tarde me junto con ella“.
Por último, explicó que cuando su hijo estuvo internado, su ex “se fue a las siete de la tarde y volvió a las dos de la mañana porque se fue a comer con los amigos“. “Siempre supe que con mi bebé estábamos los dos solos. Mi hijo es feliz y no le va a faltar nunca nada. En las peores momentos, siempre estuve sola. En los últimos dos años el padre no me acompañó en casi nada: salía de joda más de lo normal“, concluyó.